El dueño de un restaurante cercano ve todo y le paga a la niño las medicinas. Luego, le pide a su hija, una niña, que le traiga un poco de sopa de verduras para dárselo al niño.
El niño "ladrón" sale corriendo.
Pasaron 30 años...
Al dueño del restaurante le da un infarto y su hija, se encuentra en el hospital con una factura de 18.000€ (Euros).
Un día, al despertarse, se encuentra con que la factura está pagada y una nota en la que dice : "Todos los gastos fueron pagados hace 30 años con tres paquetes de analgésicos y una sopa de verduras. Saludos Cordiales, el Doctor Prajak Arunthong".
Es decir, el niño había crecido, se había convertido en médico y le había devuelto el favor de hace 30 años atrás.
Y termina con el slogan "Dar es la mejor comunicación".